Importancia de la formación continua
Durante la apertura del evento, el Dr. Santiago García Álvarez, rector de campus Ciudad de México, dijo a los presentes: “Nosotros que nos dedicamos a este mundo tan apasionante como es la educación, siempre estamos preocupados por la formación de nuestros alumnos y nuestros profesores (…). Pero a veces, nos pasa que no pensamos en el propio proceso de formación”.
“Como directivos, personas en distintas instituciones educativas a nivel de toma de decisiones, también necesitamos de esos procesos de formación. A veces nos enfocamos demasiado en formar a otros, pero nos viene bien la pregunta: ¿cómo le puedo hacer yo para formarme más?”, señaló.
Citando a Carlos Llano, enunció una frase que, en su experiencia, ha servido mucho a los miembros de la Panamericana: “‘¿Ustedes quieren ser más? Sean mejores’. (…). Si nos preocupamos por nuestra propia consolidación, formación y mejora continua, al final vamos a acabar cumpliendo con más metas de las que nos fijemos”, precisó.
Del mismo modo, recordó: “(…) la educación es la mejor inversión en el corto y mediano y largo plazo, (…) lo que hacemos no queda en el vacío, tiene un efecto”.
Poner a la persona en el centro
Durante el foro, el Dr. José Manuel Núñez Pliego, rector emérito de la Panamericana, impartió la ponencia Dirección, entre el liderazgo y la persona. Durante esta, habló sobre cómo dirigir en el actual momento en el que se encuentra la educación, misma que enfrentó una pandemia y muchos cambios.
“Tenemos que tener muy claras tres cosas: objetivo, misión y a dónde voy; así como recursos, con qué medios cuento con qué trabajo para conseguir aquello que me he propuesto, y poner a las personas en el centro, con las que voy a lograr el propósito que me he planteado”, señaló Núñez Pliego.
Sobre lo que implica la dirección expuso: “La tarea de dirigir no es otra cosa más que articular a las personas para que persigan el objetivo que nos hemos propuesto, dándoles los recursos que son necesarios para conseguir aquello que nos hemos planteado”.
En cuanto a la visión institucional manifestó: “(…) tengo que conseguir que esa visión sea significativa para todos aquellos que tienen que jugar un papel en realizarlo. No basta con que yo tenga claro a dónde quiero ir, es necesario que sea significativo para las persona que contacten conmigo la tarea de llegar a ese sitio (…)”.
Mientras que sobre la tarea de dirigir a otros reveló: “La única manera de que la gestión entre personas funcione es establecer confianza, si no hay confianza las cosas no suceden”.
Ocuparte de tu equipo
Asimismo, destacó: “Un buen líder es un buen maestro, ¿qué hace a un buen maestro? Es aquel que se ocupa de la persona y no de la tarea que tiene que realizar la persona. Es decir, se preocupa por el cómo lograr que la persona sea mejor y no por el cómo lograr que la persona haga algo”.
Entre las capacidades que nombró que debe tener un buen líder esta la empatía y la capacidad de ser pertinente. También compartió una idea que dijo es fundamental: “Yo no puedo dirigir nada si no soy capaz de dirigirme un poco”.
“Necesitamos urgentemente de personas que sean capaces de volver a estructurar una narrativa entusiasta de un proyecto educativo. (…) Lo que ustedes hacen todos los días en las escuelas deja huellas indelebles”, finalizó.
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